POST: John M. Greer –“La Edad Oscura en los Estados Unidos: El Tesoro de los Nibelungos”

[Anselmo]

12 noviembre 2014

http://thearchdruidreport.blogspot.com.es/2014/11/dark-age-america-hoard-of-nibelungs.html

De todas las diferencias que separan economía feudal esquematizada en el post de la semana que viene con respecto a la economía de mercado que la mayoría de nosotros habitamos hoy día , la ausencia total de dinero en la vida cotidiana medieval . El dinero resulta tan central a las actuales ideas de economía que funcionar sin el resulta impensable estos días. El hecho – y naturalmente es un hecho – de  que la  inmensa mayoría de las sociedades humanas, las civilizaciones complejas entre ellas, han funcionado bastante bien sin dinero de ningún tipo resulta prácticamente inasimilable para nuestra imaginación colectiva.
Una fuente de esta curiosa ceguera, he llegado a pensar, es la manera en la que la lógica del dinero es presentada a los estudiantes en el colegio.
Aquellos de mis lectores que asistieron a las clases de …. No dudaran en recordar el tipo de narrativa que inevitablemente  aparece en los libros de texto cuando tratan esta cuestión.
Supongamos que tenemos, digamos un porcicultor , al que le duele la boca por causa de un problema dental , pero que el único dentista de la aldea es judío, así que el porcicultor no puede pagar al dentista por su trabajo con chuletas y panceta de cerdo, por su trabajo de dentista. El trueque puede ser  una opción, pero de acuerdo con la narrativa del texto escolar esto requeriría una serie de complicados tratos entre varias partes , en el que el porcicultor entrega  productos porcinos al carpintero quien construye un garaje para el mecánico de automóviles , quien arreglar el coche del  peluquero y finalmente las cosas le llegan al dentista. Una vez que el dinero entra en escena , en contraste el porcicultor vende panceta y chuletas al todos y emplea parte de los beneficios obtenidos en pagar al dentista y todos contentos. ¿De acuerdo?

Bien, puede ser, detengámonos ahí porno un momento, y echemos una mirada a las supuestos imbricados en esta corta historia. En primer lugar la narración presupone que todos los participantes tienen un único papel económico rígidamente definido: le porcicultor solo puede criar cerdos, el dentista solo puede trabajar como tal, etc. Y lo que es más se da por supuesto que los  participante s no pueden anticiparse a sus necesidades y adaptarse para atenderlas: incluso a pesar de que el único dentista en la aldea es judío, el porcicultor no puede actuar en consecuencia y dedicarse a la cría de corderos para Pascua como actividad complementaria, o lo que se te ocurra. Finalmente la narración presupone que tan solo pueden interactuar económicamente mediante intercambios de mercado: no hay otras opciones para atender las necesidades de los bienes y servicios, no hay otras opciones para atender necesidades para bienes y servicios, ni nigua otra forma para arreglar las transacciones entre la gente distinta entre la ley dela oferta y la demanda .

Incluso en las sociedades industriales modernas , estos son tres suposiciones que raramente se cumplen. Yo conozco varios porcicultores, y ninguno de ellos está tan super especializado que que sus contribuciones a los intercambios económicos está limitado a los productos porcinos; hortalizas, huevos frescos, venado, whisky casero, y muchas otras buenas cosas pueden formar parte de la ecuación igualmente. Afuera del paisaje  a base de los característicos  corrales d engorde  del agricultura industrial, las granjas agro-ganaderas   cultivando diversas cosechas y criando varios tipo de ganado  son mucho más resilentes que una granja de monocultivo  y por consiguiente son considerablemente más comunes en sociedades que no han forzado cada  todas sus actividades económicas para hacerlas encajar en el molde dela economía monetaria.
Como para el segundo punto planteado antes , la ley de oferta y demanda trabaja tan efectivamente en una economía de trueque como en una economía monetaria, y los participantes están siempre a la búsqueda de un bien servido del que  haya menos oferta que demanda potencial  , y que por consiguiente pueda ser intercambiado con ventaja. No es accidental que las agriculturas de aldea tradicionales tiendan a estar tan exquisitamente adaptados  a producir exactamente la mezcla de bienes y servicios que los habitantes de la aldea necesiten y deseen.

Finalmente, como es lógico, hay muchos modos de afrontar el problema de la producción y distribución de bienes y servicios sin enredarse en  intercambios mercantiles. La economía doméstica , en la que los miembros de cada casa      producen bienes y servicios que ellos mismos consumes , es el fundamento de la actividad económica en le mayor parte de las sociedades humanas , y continua siendo la responsable de la mayor parte del valor económico producido por los Estados Unidos hasta no hace mucho mas de un siglo . La economía de regalos, en la que los miembros de una misma comunidad regalan su exceso de producción a otros miembros de la misma comunidad con la expectativa de que el regalo sea retribuido de modo análogo, es inmensamente común; así la economía feudal esbozada en el post de la semana pasada, que consiste en la expulsión sistemática de las fuerzas del mercado de la esfera económica . Hay otras , en un buen numero , que tampoco requieren dinero en absoluto.
Así la lógica detrás del dinero muy claramente no es la de la historia del libro de texto mencionado antes. Esto no significa que dicha historia carezca por completo de lógica; lo que significa es que nadie desea hablar sobre le significado real del dinero. Afortunadamente, hemos discutido los temas relevantes en el post de la semana pasada , así que yo puedo resumir la materia en una simple frase : la ventaja del dinero es que facilita la intermediación.

La intermediación para aquellos de mis lectores que no leyeron el post de la semana pasada , es el proceso mediante el cual otras personas se insertan a si mismas entre el productor y el consumidor de cualquier bien o servicio , y se incautan de una parte de los beneficios de la transacción . Esto resulta muy fácil de hacer en una economía monetizada, porque- tal y como todos sabemos por experiencia personal –los  intermediarios simplemente pueden cargar una comisión por cada servicio que ellos afirmen proporcionar, y entonces pagar por aquellos bienes o servicios que ellos deseen.
Imagine, como  manera de comparar , el problema irresoluble de un intermediario que desea insertarse a si mismo ,y percibir su correspondiente comisión, en una transacción en la que no hay dinero entre el porcicultor y el dentista. Supongamos que el trato concertado consiste en que el porcicultor críe los suficientes corderos para que todas las familias judías dela aldea puedan tener una adecuada mesa ritual de Pascua. El dentista se hace cargo de la atención  dental  del porcicultor y su familia , y las otras familias en la comunidad judía realizan cosas con el dentista en intercambio por sus corderos – un tipo de arreglo , a mitad de camino entre el intercambio y la economía de regalo, que es tolerablemente común en comunidades unidas.
La intermediación funciona gracias a llevarse un porcentaje de cada transacción . El porcentaje puede ser descrito como un impuesto una comisión , un pago de interés , una tasa pro servicio, o lo que se te ocurra , pero este se remite a la misma cosa : siempre que el dinero cambie de mano , parte de este es succionado par a el beneficio de los intermediarios interpuestos en la transacción . La misma cosa puede ocurrir en algunas transacciones en las que no interviene el dinero, pero no en todas. Nuestro intermediario puede ser capaz de llevarse un cordero de cada cordero que cambia de manos , requerir al porcicultor la entrega de un cordero por cada seis entregado a las familias judías locales, no obstante se da por supuesto que, o bien le gustan las chuletas de cordero o bien puede intercambiar el cordero con algún otro a cambio de algo que él desee.
¿De qué modo , no obstante , él va a hacer para llevarse un porcentaje del lado de dentista de la transacción ¿ no tendrá mucho sentido exigir un diente de cada seis de los que el dentista extraiga, por ejemplo , y exigir al dentista empastar un diente del intermediario  por cada veinte empastes que realice sería como mínimo desagradable- que pasará si el intermediario no precisara que se le realizara ningún empaste durante ese año?. Lo que es más, una vez que el intermediario se ha visto confinado a tales grosero términos físicos, resulta difícil sostener que no se trata de otra cosa que de una relación parasitaria que beneficia al intermediario a expensas de todos los demás.

Loa que hace que la intermediación parezca tener sentido en una economía monetaria  es que el dinero es la intermediación primaria. El dinero es un sistema  de símbolos arbitrario empleado para facilitar el intercambio, pero también es mucho más que eso. Es el marco de las leyes instituciones y relaciones de poder el que crea los símbolos, define su valor oficial, y decreta que sean empleadas para determinadas clases de intercambio económico. Una vez que el uso del dinero resulta requerido para determinado propósito, la gente que controla el marco – bien se trate de funcionarios gubernamentales, banqueros o cualquier otra cosa – son quienes deciden los términos en los que cada cual tiene acceso al dinero, lo que resulta en el control efectivo de todos ellos. Es decir, ellos se convierten en los intermediarios principales  y cualquier otra intermediación depende de ellos y del sistema monetario que ellos controlan.

Esto es  el porqué de porqué de , para citar un ejemplo, la administración colonial británica en Africa     impuso un impuesto  por su casa  a la población nativa , incluso a pesar de que el costo de administrar y recolectar tal impuesto superase a los ingresos obtenidos gracias al mismo. Al exigir que el impuesto fuera pagado en dinero  en lugar de ene especies, el gobierno colonial obligaba a los nativos a participar en la economía monetaria, en términos que estaban, naturalmente, establecidos  en función de los intereses del gobierno colonial y de los intereses empresariales británicos. La economía monetaria es la base sobre la cual casi todas las demás otras formas de administración se apoyan, y el forzar a los pueblos nativos  a trabajar por dinero en lugar de permitirles satisfacer su necesidades económicas en maneras menos susceptibles de ser explotadas  fue una parte esencial del mecanismo que bombeó riqueza de las colonias para el beneficio británico.

Viendo el modo en que la economía monetaria se ha ido infiltrando en cada una de las dimensiones de la vida moderna en una sociedad industrial y tu tendrás un asiento de primera fila  para observar la metástasis de la intermediación a lo largo de las últimas décadas. A donde va el dinero, la intermediación le  sigue: esta es una delas realidades inmencionables de la economía política, la ciencia que Adam Smith realmente fundó , pero que fue disecada y colgada de la pared- convertida en lo que es la pseudociencia contemporánea de la economía – una vez que llego a hacerse dolorosamente claro el tipo de jaleo que se montaba cuando la gente comenzaba a hablar delas implicaciones de las relaciones existentes entre  poder político y riqueza.
Hay otra cara de la metástasis que se acaba de mencionar , sin embargo , y esta tiene que ver con los hábitos de pensamiento que la economía monetaria exige y  refuerza. En el corazón del sistema económico está el concepto del valor abstracto , la idea de que bienes y servicios comparten un común , atributo objetivo  denominado “valor “que puede ser calibrado de acuerdo con la medida unidimensional del precio.

Este es un sorprendentemente complejo concepto, y por tanto precisa ser examinado aquí . Los filósofos generalmente reconocen una distinción crucial entre hechos y valores; hay varios modos de distinguirlos , pero el que importa a nuestros actuales propósitos  es que los hechos son colectivos y los valores individuales . Consideremos la frase”llovió aquí la pasada noche “. Dadas las definiciones sobe entendidas de “aquí” y de la “pasada noche” , esta es una declaración factual ; todos aquellos que permanecieron en el exterior la pasada noche en la ciudad donde vivo , y miraron hacia arriba , recibieron goas de lluvia en sus caras . En el  sentido estricto de la palabra, los hechos son objetivos - esto es, ellos tratan con las propiedades de objetos de percepción, tales como gotas de agua y noche.
Los valores por contraste son subjetivos- esto es ellos tratan con las propiedades de objetos percibidos , tales como gente que mira hacia el cielo y recibe la salpicadura en sus caras . a una persona le irrita la lluvia , a otra le grada , otra es completamente e indiferente a la misma, y estos juicios de valor son irreductiblemente personales ; no es que la lluvia sea irritante, agradable o indiferente, son los individuos los que son afectados de otros modos . Ni son estas evaluaciones personales fáciles de clasificar en una escala lineal sin una drástica distorsión. La experiencia humana de valor es una cosa ricamente multidimensional; hay incontables sobras de significado disponible para hablar sobre evaluaciones positivas,  y al menos muchas más para las negativas. ¿ que “valor”  le asignarías? Y reduce la respuesta una escala numérica denominada en dólares, céntimos o el equivalente local. Como cualquier otro acto de abstracción reduccionista , este tiene sus aplicaciones , pero los beneficios de cualquiera de tales actos  siempre tienen que ser medidos con respecto a las zonas ciegas  generadas por los modelos reductivos de pensamiento , y las consecuencias de tal ceguera inductiva deben ser  o bien prevenidas o bien afrontada s en su totalidad. Lo último con mucho la más común de las dos opciones, y es verdaderamente la porción que la sociedad industrial moderan ha elegido con entusiasmo.
Aquellos de mis lectores que quieran ver la ceguera antes mencionada en su plenitud  tan solo necesitan volverse hacia alguno de los economistas teóricos cornucopianos populares  de estos tiempos. La indulgente y fatua insistencia de que el agotamiento de recurso no puede ser posiblemente un problema , debido a que la inversión en capital adicional resultará inevitablemente en nuevas fuentes de suministro – precisamente la misma logia, apropósito, que aparece en la legendaria declaración “ no puedo estar en descubierto, todavía me quedan cheques por rellenar”- es implicada por el constreñimiento del valor cualitativo en precio cuantitativo  ya discutido . La costumbre de reducir todo tipo de valor  a un mero precio es rentable en una economía monetaria, debido a que esta facilita ignorar cada variable con la que nos podemos encontrar en el proceso de hacer transacciones monetarias; desafortunadamente esta pasa por alto un hecho pequeño paro  de importancia crucial, que es el hecho de que las realidades de la física y la ecología triunfan sobre las leyes de la economía ;estas  no pueden ser ni sobornada ni compradas.

La obsesión contemporánea con el valor abstracto , no está limitada a los economistas y a quienes creen en sus enseñanzas , ni es un factor potencial para el desencadenamiento de  consecuencias catastróficas. Yo estoy pensando aquí en aquellos que han comprendido el hecho de que la sociedad industrial está en declive , pero cuya respuesta consiste en buscar algún modo de llevarse al saco cuanto más valor abstracto sea posible llevarse ahora , con el propósito de que pueda estar disponible para ellos en una supuesta sociedad post colapso . Con mucha frecuencia el oro juega un papel preponderante en esta estrategia, sin embargo hay una variedad de vehículos menos populares que juegan papeles protagonistas en la misma case de planes.
Ahora, como es lógico era posiblemente inevitable en una sociedad de consumo  como la nuestra  que incluso el desplome de la civilización industrial  puede desencadenarse puntualmente  en aun otra razón adicional para ir de tiendas. No obstante, hay otra dificultad aquí, y esta es la misma estrategia  que se ha  sido probada antes, en muchas ocasiones, en los últimos años de otras civilizaciones. Hay un amplio campo de evidencia histórica que puede emplearse para ver justo lo bien que trabaja. ¿ la forma rápida ¿. No lo aconsejo.

Sucede, por ejemplo , que que entre las leyendas y cantares de la Alta Edad Media europea  hay un puñado  que trata con acontecimientos históricos en los años posteriores a la caída de Roma : los Nibelungos , Beowulf, los fragmentos más antiguos de las sagas noruegas , y algunos otros. Naturalmente todos estos comenzaron como tradiciones orales, y finalmente encontraron su camino para pasar a  forma escrita a , siglos después de que acontecieran los hechos que ellas narraban , cuando fueron compiladas no había modo de comprobar la veracidad de los actos que narraban; ellos también incluyen abundancia de leyendas locales y mitos , tal como las tradiciones orales suelen hacer . No obstante ellas describen acontecimientos y costumbres sociales que han sido confirmadas por registros históricos y evidencias arqueológicas, y ofrecen una de las mejores ojeadas  que tenemos en la experiencia vivida de descenso a una edad oscura.

Loas metales  preciosos jugaron una parte importante en la economía política de aquella era- no hay sorpresas en esto , en la medida que el mundo romano tenía su moneda basada en los metales preciosos , y dado que los bancos no habían sido inventados todavía , los objetos portables de oro y plata eran las forma más común en la que las clases acaudaladas escondían su riqueza personal.  A medida que el Imperio Romano de Occidente  zozobraba en el siglo V d.J.C. y su economía de mercado se venía abajo, atesorar metales preciosos se convirtió en una práctica habitual, y las aldeas rurales, las granjas de aquellos tiempos , brotaban por todas partes como setas . Cuando los arqueólogos excavan en los antiguos emplazamientos de  esas villas , éstos  encuentran rutinariamente evidencia de que estas villas fueron saqueadas y quemadas y, con relativa frecuencia un arqueólogo o un aficionado con un detector de metales ha encontrado un alijo de metales preciosos enterrados en algún lugar en las proximidades ,  un recordatorio expresivo de en qué medida realmente benefició aquel almacenamiento de riqueza abstracta a su propietario.

Estw es el mismo relato que subyace en todas las viejas leyendas : cuando hay un tesoro de por medio , un montón de gente va a morir por su causa. La saga Volsunga y el cantar de los nibelungos , por ejemplo , son versiones de la misma historia , basadas en oscuras memorias  de acontecimientos acaecidos en el Valle del Rin  durante el siglo  siguiente a la caída  de Roma. El relato primario , es un tesoro del tipo habitual en el final del imperio romano , que pasa de una mano a otra pro medio del asesinato , la tortura, la traición, la venganza  y el exterminio de dinastías enteras . A este propósito , cuando Beowulf muere tras haber dado muerte a su dragón , y sus hombres descubren que el dragón estaba custodiando un tesoro , ¿se regocijan?. En absoluto; ellos dan por sentados que otros los reyes y guerreros de los reinos vecinos van a venir a matarlos a ellos para arrebatarles el tesoro- y de hecho es lo que ocurre. Así eran los negocios como siempre en la Alta Edad Media.

El problema de acumular oro al comienzo de una edad oscura  tiene así simplemente otra dimensión, si bien más extrema , del problema más general de la intermediación.  Esto lleva a recordar que el oro no es riqueza ; es simplemente una forma perdurable de dinero , y así , como cualquier otra forma de dinero un símbolo arbitrario que envuelve una declaración con respecto a la riqueza real – que es , bienes y servicios-que otra gente produce . Si los bienes y servicio son están disponibles , un sótano acorazado lleno de monedas de oro no va a cambiar este hecho , y si la gente que puede proporcionar esos bienes y servicios los necesita en mayor medida que el oro , lo mismo es cierto. Incluso si los bienes y servicios pueden se r intercambiados, este oro está pujando por el mismo suministro reducido , y el oro no va poder comprar en una cantidad próxima a lo que los hace hoy en día . Lo que es más, los  símbolos de valor abstracto tienen otra desventaja en la sociedad  donde el imperio de la ley se ha venido abajo : ellos atraen la violencia en la misma medida que una rata muerta atrae a las moscas.
El fetichismo por el almacenamiento de oro siempre me ha resultado impactante, de hecho, como la prueba mejor posible de que la mayoría de la gente que qiensa que se esta preparando para un colapso social total no ha realmente reflexionado sobre el tema , ni considerado las condiciones que imperarán después de que los escombros hayan terminado de desprenderse . Supongamos que la civilización industrial se viene abajo rápida o lentamente y que tú tienes oro. En tal caso, o bien tú lo gastas en la compra de bienes y servicios  tras el colapso , o no lo haces . Si lo haces, todo el mundo de tu vecindad pronto sabrá que tienes oro , el imperio de ley ya no disuadirá a la gente de asesinarte para robarte el oro en el mejor estilo nibelungiano, y antes o después te quedarás sin municiones . Si no lo has gastado , que bien te hará el tener oro?.

En la época en la que las condiciones nibelungicas sean de aplicación- cuando por ejemplo , bandas armadas se muevan de una granja a otra , aniquilando a la gente escondida en ellas , viviendo por algún tiempo del producto de su saqueo , y después trasladándose a la siguiente , o cuando los gobiernos locales apresen a las familias de aquellos de quienes se crea que tienen oro  y las torturen hasta la muerte , comenzando por los niños hasta que alguien ceda – es una etapa común en las edades oscuras. También es una etapa auto terminante, debido a que tarde o temprano los suministros disponibles de metales preciosos u otros portadores de riqueza abstracta son bastante limitados  para los señores de la guerra. Puede tomar un siglo o dos antes de que de que alcanzaremos la etapa conmemorada en  el poema sajón “el navegante” ……(ya no hay los reyes ni cesares ni otorgadores de oro  que una vez hubieron).

Es cuando las cosas comienzan a calmarse y el tipo de ordenamiento feudal esbozado en el post de la semana pasada comienza a emerger, cuando el dinero  y el mercado juegan un pequeño papel en la vida de la mayor parte dela gente  y la tierra y el trabajo se convierten en el fundamento de una nueva, empobrecida ,   pero relativamente estable sociedad fueron la regla de la ley de nuevo se convierte en realidad . Ninguno de nosotros vivirá lo suficiente para ver la llegada de tal periodo , pero es bueno conocer hacia donde se dirige el proceso . Discutiremos las implicaciones de tal conocimiento en un post futuro.

[Kanbei]

Gracias Anselmo, por la traducción.
Este es uno de los posts que más me impactó del Archidruida, por su carga mitológica, y porque desmonta el mito del oro.

Cuando escucho a algunos hablar del valor refugio del oro ... realmente siento pena.
La lectura de este post me llevó a revisitar El Anillo del Nibelungo, de Wagner, y comprender su visión profética.
Un anillo que te abre todas las puertas, pero oscurece tu corazón, como le sucede a los que ansían la acumulación de dinero. Qué grande.

Beowulf también resulta muy interesante, pero menos que la versión wagneriana, y maldito Wagner, qué música!!

El Archidruida no enseña el camino, pero muestra los derroteros peligrosos que siguen los dirigentes, que a su vez manipulan a las masas.

Los señores del guerra que saquean y torturan en busca de oro son la peor visión del futuro que podamos imaginar.  Y el peor saqueo que sufrieron los pueblos precolombinos por parte de los conquistadores españoles.

Hubo un pueblo que invadió Iberia 1.300 años atrás, los árabes, y descubrieron el gran tesoro de esta tierra, que en su desierto natal escaseaba, el agua.

Ni el oro, ni los esclavos, ni las tierras cerealistas, ni las fundiciones. Ellos amaban el agua, y levantaron acequias, algibes, jardines, estanques ... .

[demián]

El problema del oro y de cualquier objeto de intercambio (incluso un piso en un edificio de viviendas) es que tiene sentido adquirirlos o mantenerlos en períodos inflacionarios (o bien de desparición de una moneda como puede ser el caso del colapso de un Estado).
Para todos los otros casos el valor pasa del agua, a la tierra fertil, a los árboles, a los granos, a la buena salud, a las herramientas y por supuesto a las fuentes de energía... más o menos en ese órden... por supuesto hablando de una economía sedentaria...

[Bihor]

Muchas gracias por la traducción, ya la he incorporado al índice general.

Un saludo

[Demóstenes Logógrafo]

Aunque en el contexto general el Archidruida siempre parece tener una visión prístina (y una escritura muy bella), un servidor que también se remite a la historia, debe discrepar un poco esta vez. Mucho oro (entiéndase oro en sentido amplio, puede ser cualquier cosa que sirva para acumular valor monetario) puede ser contraproducente, desde luego, pero una pequeña cantidad puede ser un seguro de vida.

No vamos a pasar (al menos no en todas partes) del actual escenario a una nueva edad oscura, habrá muchas etapas intermedias. En la edad oscura, por los motivos que comenta el Archidruida, y por otros que obvia, el oro puede no ser una ayuda. Sin embargo, en todas las etapas intermedias por las que podemos atravesar, puede que sí lo sea. En España, por ejemplo, los que tenemos padres o abuelos que vivieron la guerra civil y la posguerra, hemos oído decir muchas veces como las tierras, las casas, "las cuatro perras" (la perra era el apodo de una moneda de poco valor del s. XIX) que hubieran podido juntar, y sobre todo, las pocas joyas o alguna moneda de plata de la época colonial, sirvieron en más de una ocasión para comprar voluntades y sacar a algún miembro de la familia de la cárcel (evitándole una muerte casi segura), o para comprar a precio de escándalo alimentos de contrabando con los que paliar el hambre. Tuve familia en los dos lados de la contienda, y en ambos bandos contaban las mismas cosas con bastante poca diferencia (la diferencia básicamente fue la duración de la calamidad en el lado de la república), y de aquello me queda la certeza de que tener algún pequeño colchón nunca está de más, pero mejor en valores que no dependan del vaivén de los bancos centrales.

Así que, por una vez, voy a discrepar, al menos en parte, del Archidruida...

Saludos,
D.