POST: John M. Greer –“Lluvia de financieros del Fracking”

[Anselmo]

       
Adjunto la traducción del post de esta semana del Archidruida, en el que el autor augura un pronto hundimiento del mercado bursatil relacionado con el fracking.
Para ver el original :  http://thearchdruidreport.blogspot.com.es/2014/08/heading-toward-sidewalk.html

        “Hablar de cambio histórico es una cosa cuando los cambios que se discuten están a una distancia conveniente hacia el pasado o hacia el futuro. Es otra cosa  muy distinta cuando los cambios ya están teniendo lugar. Esa es una de las cosas que añade complejidad al proyecto de este blog, porque la decadencia y caída de la civilización industrial moderna no es algo que podría tener lugar algún día, si X o Y o Z sucede o no sucede; se trata de un proceso que ya está en marcha ahora, a nuestro alrededor, y una buena parte de los tumultos de nuestro tiempo están siendo impulsados por el hecho innombrable pero ineludible de que el proceso de declive está empezando a coger velocidad.

Esos tumultos son al menos tan relevantes para el proyecto de este blog como los acontecimientos similares acaecidos en los últimos años de civilizaciones pasadas, y por lo que va a ser necesario de vez en cuando para hacer una pausa la secuencia actual de posts, dejar de lado las consideraciones de un futuro lejano de momento, y echar un vistazo a lo que está sucediendo aquí y ahora. Esto va a tomarnos unas semanas, debido a que  una señal que he estado esperando durante un par de años por fin ha aparecido, y su aparición significa que un verdadero problema puede ser inminente.

Esto ha ocurrido sin duda en una semana que se podría calificar cuando menos de borrascosa . Sospecho que la mayoría de mis lectores han estado dedicando por lo menos un poco de atención a la epidemia de Ébola que se está extendiendo a través de África Occidental. Durante la última semana, la Organización Mundial de la Salud ha puesto de manifiesto que las estadísticas oficiales de extensión de la epidemia están  significativamente sesgadas el sentido de  reducir , la principal organización no gubernamental que lucha contra el Ébola ha admitido que la situación está fuera de control , y una serie de eventos situados a medio camino  entre el absurdo y el horror- un motín en uno de los barrios más pobres de Monrovia dirigido contra una instalación de cuarentena de emergencia, en la que los saqueadores se llevaron ropa de cama y ropa de cama contaminada con el virus del Ebola, y los pacientes en cuarentena huyeron confundidos con la multitud-pueden llevar  a Liberia a  escenas no vistas desde el apogeo de la muerte Negra. La posibilidad de que este brote pueda convertirse en una pandemia mundial, todavía es pequeña, pero no es descartable.


Mientras tanto, más cerca de casa, lo que se ha convertido en un acontecimiento rutinario en la América de hoy-la matanza ocasional de un hombre afroamericano desarmado por la noche por la policía-ha explotado de una manera decididamente no rutinaria, con imágenes que recuerdan a la plaza Tahrir de El Cairo que se desencadenó la noche siguiente en el suburbio de St. Louis de Ferguson, Missouri. La cultura de la militarización y la impunidad que está arraigada en las policías urbanas en los Estados Unidos se ha mostrado en una luz muy poco favorecedora, como agentes de policía aparecen en los noticieros de todo el mundo vestidos como tropas de asalto en el semejando formar parte del equipo de actores de  una mala película de ciencia ficción, hicieron todo lo posible para ejecutar su papel, atacar con lacrimógenos y golpes de porra a los manifestantes, periodistas y transeúntes al azar en una orgía de entusiasmo hitleriano tan flagrante como para que los mismísimos republicanos del Tea Party hayan comenzado a hacer discursos preocupados acerca de qué tan cerca esta se asemeja al comportamiento de un estado policial.

Si la policía sigue así, la primavera árabe de hace unos años sólo puede ser acompañada de un otoño estadounidense. Incluso si alguna chispa persistente de sentido común quedara en las cabezas de las autoridades estatales y locales  y se evitase esto, la próxima vez que un oficial de policía blanco la emprenda a tiros contra  un afro-americano sin ningún motivo en particular-y habrá una próxima vez; este tipo de eventos, como se señaló anteriormente, son de rutina en los Estados Unidos en estos días-la explosión que seguirá será aún más grave, y el riesgo de que una explosión de este tipo pueda acabar conduciendo al surgimiento de una insurgencia interna no es pequeño. Señalé en un post de un par de años atrás que la manera americana de guerrear prácticamente garantiza que en cualquier país conquistado por nuestros militares nazca una insurgencia en el corto plazo a partir de entonces; hay una gran cantidad de ironía en la idea de que la importación del mismo modelo de la guerra a la práctica de la policía en los EE.UU. puede tener exactamente el mismo efecto aquí.





Puede venir como una sorpresa para algunos de mis lectores que la señal a  que me refiero no es ninguna de estas cosas. No, tampoco es el gran volcán en Islandia que está mostrando signos preocupantes de estar a punto de hacer volar su cima. Se trata de una, algo absurda reseña de un libro menor en un mediocre blog  de-asesoramiento financiero blog y el único motivo àra mencionarla aquí es debido a que , a mi entender, constituye  un presagio de algo mucho más importante.

Una mirada al pasado puede ser útil aquí. El 9 de septiembre de 1929, un periódico financiero tan importante como el Barron´s distrajo parte de su tiempo que habitualmente dedica a jalear el gran movimiento al alza del mercado de valores para arremeter contra un analista de inversiones llamado Roger Babson en términos acalorados. ¿El crimen de Babson? Sugerir que el gran movimiento alcista que acabamos de mencionar fue parte de una burbuja especulativa clásica y que el inevitable estallido de la burbuja podría causar una depresión económica. Babson había estado diciendo este tipo de cosas durante todo el auge bursátil de finales de 1920, y hasta que el verano, los principales medios de comunicación financieros simplemente no le ignorron, del mismo modo que ignoraban a todos los demás cuyo sentido de la realidad económica no se había ido a dar un paseo del que aún no había vuelto.

 Para los que siguieron los medios de comunicación, de hecho, el verano y el otoño de 1929 fueron notables sobre todo por el hecho de que un conjunto de creencias que la mayoría de la gente daba por sentado-por encima de todo, la afirmación de que el mercado de valores podría seguir subiendo indefinidamente- de repente se estaba defendiendo  enérgicamente por todaspartes, a pesar de que nadie las atacaba. La edición de junio de The American Magazine presentó una entrevista con el financiero Bernard Baruch, insistiendo en que "la condición económica del mundo parece estar al borde de un gran avance." En la edición de 08 de julio de Barron, en la misma línea, un artículo insistió en que la gente que estaba preocupada por la cantidad de deuda que se destinaba a apuntalar el mercado no entendía el papel de los préstamos a  los corredores de bolsa como una nueva e importante inversión para la toma de dinero de las empresas

Tan tarde como el 15 de octubre, cuando la gran crisis estaba a sólo unos días, el profesor Irving Fisher de departamento de economía de Yale hizo su famoso anuncio a los medios: "Los precios de las acciones han alcanzado lo que parece una meseta permanentemente alta." Ese tipo de bombo era deir que hay que seguir el negocio como de costumbre, entonces como ahora. Agredir a los críticos de la burbuja en la presnsa, citándolos por su nombre, no se hacía. Sólo cuando el mercado se estaba deslizando hacia el abismo de la crisis de 1929 fue cuando los columnistas financieros apuntaban con  sus armas retóricas sobre el puñado de personas que habían estado diciendo todo el tiempo que el auge inevitablemente terminaría en hundimiento.
Esa es una característica muy común de las burbujas especulativas, y se pudo localizar en cualquier número de ejemplos históricos, a partir de la burbuja de los tulipanes en los Países Bajos del siglo 17 y pasando de allí. Algunos de mis lectores también pueden haber experimentado lo mismo por ellos mismos en el pasado no muy lejano, durante las últimas etapas de la gigantesca burbuja inmobiliaria que estalló tan desordenadamente en 2008 , y una mirada hacia atrás en esa experiencia le ayudará aclarar las implicaciones de la señal que noté en la semana transcurrida.



Antes, cuando la burbuja inmobiliaria se ha disparado a las alturas vertiginosas y desesperadamente insostenibles, he utilizado para realizar un seguimiento de su progreso un par de sitios agregadores de noticias, especialmente el animado  HousingPanic de Keith Brand. De vez en cuando, cuando la burbuja alcanzó su punto máximo y comenzó a perder aire, me sentaba con un vaso de whisky, una serie de enlaces a los últimos comentarios absurdos por los promotores inmobiliarios, y mi copia de John Kenneth Galbraith The Great Crash 1929-el fuente, por cierto, de las anécdotas antes citadas-y disfrutaba viendo la retórica utilizada para insistir en que la burbuja de 2008 no era una repetición de la burbuja del 29 coincidía, en algunos casos palabra por palabra, con la retórica utilizada para el mismo fin en el 29.
Todos los blogs que negaban la realidad de la burbuja enviaron un flujo constante de comentarios hostiles de los inversionistas de bienes raíces que al parecer no podían asimilar la idea de que alguien pudiera cuestionar su acceso garantizado a la riqueza no ganada, y Brand, en particular, no pudo quejarse por verse envuelto en pocas trifulcas. Pero lo que ocurrió sólo en los últimos meses antes del estallido de la burbuja, es que estos medios que  negaban la existencia de la burbuja comenzaron  a publicar ataques personales contra Brand y sus compañeros críticos, denunciándolos por su nombre en términos acalorados y generalmente inexactos. En ese momento, me di cuenta del paralelo con el ataque de la revista Barron sobre Roger Babson, y me pregunté si eso significaba lo mismo; los acontecimientos que siguieron mostraron muy claramente que así fue.


A este mismo punto parece que hemos llegado con la burbuja del fracking -como era de esperar, ya que hasta ahora ha seguido la trayectoria normal de los auges especulativos en los demás aspectos. Desde hace algún tiempo, los medios de comunicación han estado llenos de proclamas sobre el suministro de petróleo ilimitado para los Estados Unidos, que se parecen tanto como las vacuas declaraciones sobre stocks realizadas por Bernard Baruch e Irving Fisher  en 1929,semana tras semana los bloggers y comentaristas han fustigado el concepto del pico del petróleo, la búsqueda de nuevas e ingeniosas formas para insistir en que tiene que ser de alguna manera posible extraer una cantidad infinita de petróleo de un planeta finito; por extraño que parezca, aunque es raro que a alguien se le ocurra hablar del pico del petróleo en estos foros, los argumentos de que es objeto han sido cada vez más fuertes y más agudos a medida que pasa el tiempo. Hasta hace poco, sin embargo, no me había encontrado con los ataques personales que anuncian la inminencia del hundimiento.

Eso fue antes de esta semana. El 11 de agosto, un sitio web de asesoramiento financiero acogió un buen ejemplo de la especie, y más bien, para mi sorpresa - el crítico más influyente o leído de la burbuja fracking de esa revistao - se dirigió a mí.


Eso sí, no tengo ninguna objeción a comentarios hostiles de mi escritura. Hay una serie de libros escritos por otras personas que han sido objeto de diversos tipos de tratamiento duro en mi blog, y a la reciproca mis libros han sido criticados en otras partes. Es un juego limpio. Yo no tengo inconveniente siempre que los críticos, hostiles o no, se tomen el tiempo para leer uno de mis libros antes de que  criticarlo, pero lo que es algo que ningún escritor puede sufrir es que haya críticos que claramente no se molesten ni en abrir la tapa del libro que comentan es algo que ha sido objeto de comentarios hirientes en los círculos literarios por lo menos desde el siglo 18. Sin embargo, una crítica de un libro que el crítico no ha leído es una cosa, y una crítica de un libro, que el autor no ha escrito y el editor no ha publicado es otra cosa.

Eso es básicamente el caso aquí. El crítico, un blogger del mercado de valores llamado Andew McKillop, se dispuso a criticar una versión recién re-editada de mi libro de 2008 “The Long Descent”. Esa fue toda una sorpresa para mí, así como para “Nueva Sociedad de Publicaciones”, la editorial del libro anterior, ya que no existe tal reedición. El libro en cuestión se mantiene en forma impresa en su edición original, y mis otros seis libros sobre el pico del petróleo y el futuro de la sociedad industrial son, ¡ ejem!..... , libros diferentes


Mi mejor conjetura es que McKillop vio mi nuevo título Decline and Fall: The End of Empire and the Future of Democracy in 21st Century America en un escaparate de una librería, y simplemente llegó a la conclusión de que debe haber una nueva versión del libro anterior. Todavía no estoy seguro de si los resultados podrán ser vistos como una brillante muestra de arte de teatro surrealista o un nuevo mínimo de lo que irónicamente llamamos ética periodística; en cualquier caso, el hecho es que es, sin duda, abrió una nueva senda. Aún así, confio en que McKillop hará una  mejor investigación para poder asesorar a las personas que confían en sus consejos sobre el mercado de valores.

Teniendo en cuenta que el punto de partida, el resto de la crítica de McKillop sobre mi libro es lo que se puede esperar. Deduzco que McKillop ha llegado a leer un par de comentarios en línea de “The Long Descent” y un par más de “Decadency and Fall”, mezcladas con unos pocos posts elegidos al azar en este blog, y presentando los resultados agrupados de cualquier manera, y saltado a la conclusión de que el desorden resultante era de lo que trataba el libro. El resultado es un a especie de engendro trufado  de malentendidos, incongruencias, y fabulaciones concebidas por deducción directa. Invito a quien se anime a hacer el intento de señalar el lugar en mis escritos, por ejemplo, dónde comparo colapso catabólico con "colapso anabólico" no importa lo que esta última acepción pueda significar.

Hay una cierta diversión malévola que se podría obtener gracias a esa crítica, tratando de averiguar exactamente cómo McKillop podría haberla elaborad, o cual es el pequeño trozo de desinformación incrustado en su cerebro, pero dejaré esto como entretenimiento a mis lectores. El toque de atención que me gustaría hacer aquí es que la aparición de esta pequeña inflexión en la corriente principal de un blog financiero es una señal de advertencia, que sugiere que el auge de fracking. Tal y como ha ocurrido con burbujas anteriores cuando llegaron a la etapa de “matar al mensajero”, bien puede estar tambaleandose al borde de un realmente espectacular accidente y no es el único signo, tampoco.

Las mismas preguntas acerca de la deuda que se hicieron a los expertos  sobre el mercado de valores en 1929 y el mercado de la vivienda en 2008 se les está formulando ahora, cada vez con mayor urgencia, sobre el inmenso volumen de bonos basura que actualmente están apuntalando el boom del fracking. Mientras tanto las empresas de gas y petróleo están teniendo que perforar cada vez más frenéticamente e invertir cada vez más dinero para evitar que las tasas de producción caigan en picado. Y que esos expertos no den otra respuesta que clamores alborozados sobre la "Arabia americana," y es vergonzosamente claro que el boom  del fracking es simplemente uno más dentro  de la orgía especulativa –alimentado a base de  deuda y destinado a un hundimiento desordenado. Se disfraza de una revolución energética exactamente de la misma manera que la burbuja inmobiliaria se disfrazó como una revolución del sector de la vivienda, la burbuja tecnológica como una revolución tecnológica, y así sucesivamente a través de los anales de la ilusión financiera tan hacia atrás como se quiera seguir.
Tarde o temprano-y mucho más probable más temprano que tarde-la burbuja fracking va a estallar. Apenas cómo y cuándo sucederá es imposible saber de antemano. Incluso hacer una suposición inteligente en este punto requeriría un conocimiento detallado de hasta qué punto los bancos y empresas de inversión están metidos en los negocios de fracking y similares, hasta qué punto las empresas de petróleo y gas natural han ido más lejos en el limbo financiero, y así sucesivamente. Ese es el tipo de información que las empresas en cuestión gustan esconderse  unas a otras, por no hablar al público en general; y que por tanto es  efectivamente inaccesible para archidruidas, lo que significa es que tendremos que esperar a que las quiebras, las ventas de pánico, y el golpe seco y  húmedo de los cuerpos de los  financieros precipitándose - desde las ventanas de sus oficinas en los rascacielos - sobre las aceras de Wall Street., Nos anuncién qué empresas serán las ganadoras del sorteo irresponsabilidad financiera en esta ocasión.”
De una forma u otra, el colapso de las ofertas de auge fracking justas para dar un fuerte golpe a la economía de Estados Unidos, en momentos en que la mayoría de los sectores de la economía que todavía tienen que recuperarse de la contusión que recibidaó a manos de la explosión de la burbuja inmobiliaria. Dependiendo de qué tan fuerte y alocadamente bancos y los inversionistas extranjeros han sido absorbidos por la burbuja, difícil de decir sin acceso la información financiera clave -el estallido de la burbuja podría noquear-economías nacionales en otras partes del mundo también. De cualquier manera, va a ser un poco incómodo, y las consecuencias probablemente incluirán una segunda ración del  mism guiso desagradable de rescates para los ricos, la austeridad para los pobres, la intimidación a los países más débiles por parte de sus vecinos más fuertes, y similares, que se repartió con la alegría imprudente con que se hizó tras la crisis de  2008. Tampoco es nada de esto va a hacer que sea más fácil  hacer frente a posibles pandemias, ni a insurgencias nacientes en el corazón de Estados Unidos, o a cualquiera de las otras consecuencias de nuestro cabezazo contra el suelo de la realidad.
Las consecuencias pueden ir más allá de lo contado. La principal diferencia de  la burbuja del fracking cone la burbuja inmobiliaria, la burbuja de las acciones tecnológicas, y sus parientes más atrás en la historia económica es que el fracking no se sólo se vende vende a los inversores como una manera de hacerse rico rápidamente; también fue vendido a estos inversores  y al público en general como una forma de evadirse la realidad y escaparse de la amenaza  inexorable del pico del petróleo. 2008, vale la pena recordar, no sólo fue el año en que la burbuja inmobiliaria se estrelló, y arrastró a gran parte de la economía global hacia abajo con ella; también fue el año en que todos esos profetas del “negocio como de costumbre, pos siempre” quienes insistían en que el petróleo nunca  subiría a más  60 dólares el barril tuvieron que tragarse sus presunciones cuando los precios se dispararon más de 140 dólares el barril. De repente, todas esas advertencias sobre el pico del petróleo que los expertos habían estado emitiendo desde la década de 1950 se convirtieron en una realidad difícil de rechazar de plano.



Así, la burbuja fracking tiene ascendencia mixta; su padre pudo haber sido la misma pasión despiadada para desplumar a los incautos que siempre ha anidado en el corazón frío de Wall Street aflutter, pero su madre es la asunción  de cadavez más firme del convencimiento de que haciendo caso omiso a décadas de advertencias contra la  imprudencia que supone la quema a través de las reservas finitas de la Tierra de fósiles combustibles  el mundo industrial ha retrocedido en un rincón desde el que la única manera de salir es hacia abajo. Ley de White, uno de los conceptos básicos de la ecología humana, señala que el desarrollo económico está directamente correlacionada con la energía per cápita; cuando el agotamiento se apodera de la producción y de energía per cápita comienza a declinar, el resultado inevitable es una larga era de contracción económica, en la que una galaxia de las instituciones económicas y culturales fundamentadas, espiritual o materialmente, en el dogma crecimiento continuado dejarán de funcionar, y aquellos cuya riqueza e influencia dependen de esas instituciones será dejado con pocas opciones distintas a las de saltar por una ventana de Wall Street.


Los últimos años de vitoreo mercenario presentando al fracking como la salvación de nuestra sociedad alimentanda por combustible fósil pueden así marcar algo bastante más importante que otra ronda del fraude financiero generalizado que se ha convertido en el elemento vital de la economía de Estados Unidos en estos últimos días. Es uno de los últimos-y tal vez, sólo tal vez, una de los últimas de las evasiones mentales que la gente en el mundo industrial ha utilizado en el intento inútil pero fatídico de pretender que la búsqueda del crecimiento económico ilimitado en un planeta finito y frágil es nada que no sea una receta garantizada para el desastre. Cuando la burbuja del fracking va a su inevitable destino, y la mayor parte de una década de balbuceos sobre las reservas petróleo de esquisto ilimitadas toman su lugar en los anales de la estupidez humana, es muy posible que un número significativo de personas se darán cuenta de que el universo no tiene ninguna obligación de proporcionarnos a toda la energía y otros recursos que queramos, sólo porque nosotros creamos que así debe ser. Yo no me jugaría la cabeza a esa carta. posibilidad está ahí.
Una golondrina no hace verano, eso sí, y un intento perdió el balón en una reseña del libro hostil en un sitio web no prueba que la misma etapa en el ciclo de la burbuja especulativa que vio denuncias frenéticos arrojadas a Roger Babson y Keith Brand-la etapa que viene inmediatamente antes-ha llegado el accidente en esta ocasión. Me gustaría animar a mis lectores a ver por denuncias similares dirigidas a los críticos fracking-burbuja más influyentes y respetables como Richard Heinberg o Kurt Cobb. Una vez que estos comienzan a aparecer, aferrarse a su sombrero; que va a ser un paseo salvaje.
 

[Alfis]

Uff.
Lo he intentado leer, pero los traductores automáticos son demasiado para mí.
Anselmo, gracias por el link, lo leeré en inglés por que el castellano está un poco difícil de seguir.
Si saco tiempo intentaré traducir algún párrafo.
Un saludo.
Alfis.

[Anselmo]

Alfis

Perdona la mala trduccion. Por si te resulta de interes,te transmito lo que, a mi modesto entender es la idea principal:

Cuando esta a punto de deshincharse una burbuja especulatva, los medios de comunicacion que se dedican a estimular a los inversores para que inviertan en la misma,empiezan a criticar agriamente, llegando a las descalificaciones personales,a aquellos comentaristas que desde el principio han denunciado la burbuja.

El Archidruida, considera que esa etapa de descalificaciones ya ha empezado y que,por tanto,elpinchazo de la burbija del fracking es,  a su entender,inminente.

Lo de   los financieros arrojandose por las ventanas. A mi me parece una imagen literaria,bastante exagerada.

[Dario Ruarte]

Alfis:

He leído la nota en inglés y la traducción de Anselmo y, para nada es la "traducción Google" pura y dura. Está bastante bien acomodada.

Como pasa siempre, afloja un poco al final porque, como toda tarea extensa (y que se hace gratis), a veces se afloja un poco pero, la mitad o primeros 2/3 diría que están impecables... el último tercio un poco más "flojito" pero, sin caer en el "googliano" puro.

Así que, gracias Anselmo por el esfuerzo, no comparto el comentario de Alfis porque, la traducción es decente.

Otra cosa es recordar que el Druida escribe de un modo complejo, con frases subordinadas y anidadas y eso, es difícil de traducir pero también es difícil de LEER aún en su idioma original.

[Parroquiano]

Se agradece la traducción , sobre todo aquellos que apenas manejamos un ingles "tarzanesco".

[Anselmo]

¡¡ Mil disculpas !!

Acabo de darme cuenta de que no sólo había algunas líneas initeligibles, sino que me había "comido" casi el tercio final del escrito. Cuya traducción acabo de añadir.
 

[Rodman]

Gracias por el esfuerzo, hace que sea mas asequible acceder a interesantes artículos a los que no tenemos un gran nivel de inglés.

[ENRIQUE]

Lo que esta pasando actualmente, lleva unos cuantos meses, es la entrada de dinero tonto.


Los inversores son personas ahorradoras de bajos conocimientos financieros que compran lo que se les vende, motivados por los anuncios de la prensa etc. O lo que les dice el comercial de turno que tiene los mismos conocimientos que ellos porque procede de las mismas fuentes.


La salida de los grandes inversores y la entrada de los pequeños es la señal de que el negocio se esta cerrando, es el momento de salirse de el, si no quieres convertirte en inversor a largo plazo o perpetuo, esperando recuperar el dinero invertido.

[jgustavo]

lo que mas me ha llamado la atención es que el detalle que estaba esperando para saber "que se va todo a la mierda" es algo que jamas se me habría pasado por la cabeza.

pero que tiene toda la lógica del mundo.

y es algo que lo he visto innumerables veces en la vida cotidiana, con las crisis.
cuando ya no se puede tirar mas de algo, porque no hay por donde, se ataca directamente al rival.

cuando el rival te ataca a ti, y no a tus argumentos, es que has ganado. que buen signo.

[Anselmo]

Gustavo

¡ Me has dejado de piedra !

La idea que has tenido me parece buemisima

[demián]

"Andá sacando la plata del banco"
Recuerdo cuando mis padres me dijeron eso... Argentina, noviembre 2001... Diciembre 2001 corralito...
Después de eso revoleo al azar de cosas raras (5 presidentes en una semana, saquéos masivos de productos electrónicos, clubes de trueque, surgimiento de medios independientes por internet, disparo de la desnutrición, Danone comprando empresas argentinas)...

¿Cuáles son los mensajes que debemos emitir a los desesperados, a sabiendas que esta que vendrá será una crisis más de otras que sucederán a otras?
"Sacá la plata (pasta) del banco, gastala toda en comida y ropa que dure para siempre, mantas abrigadas para pasar un invierno jodido, lo que necesites para mantener tu casa más térmica y empezá de una vez por todas a planificar tu vida fuera del sistema, con calma e inteligencia a largo plazo que aún estamos muy bien".

Gracias Anselmo, me saco el sombrero...
vuelvo a recomendar Inside Job película sobre la crisis de 2008, Margin Call (los días anteriores a la crisis y la desesperación que va tomando a los especuldores) y sobre Argentina "La dignidad de los nadies" cómo se reorganizó la gente a partir de la crisis (toma de fábricas, trueque, defensa de la tierra, movimientos de desicupados, etc.)

[Anselmo]

Damian,creo que el Archidruida se toma las cosas un poco por la tremenda. Yo le he mandado un comentario en ese sentido a su blog, cuya traducción adjunto:

"Todos los casos mencionados en este post: Disturbios causados por Ebola, los disturbios en Missouri, las diversas burbujas especulativas. Todos  los casos, repito, tienen un factor común, son manifestaciones de  fenómenos objetos  de la rama del saber llamada Psicología de Masas.

Un sociólogo llamado Gustave Le Bon en un libro que escribió en 1878, comentó que las masas se comportan como si fueran niños pequeños. Y este es un fenómeno que ha dado forma a la Historia, que está presente en nuestra vida cotidiana, y  que se manifiesta en muchos aspectos tan diversos como lo son los grandes anhelos de la humanidad. Ejemplo: las Cruzadas, la caza de brujas, y las diferentes burbujas económicas.

El caso más antiguo de autoengaño colectivo, que yo conozco, es la caída de la ciudad de Troya. En la Ilíada se dice que la princesa Casandra estubo profetizando durante años la destrucción de la ciudad, y nadie le prestó la más mínima atención. También, en la Iliada se narra el famoso episodio del caballo de Troya, en el que vemosa unos habitantes de la ciudad de Troya , tan ansiosos por el final de la guerra ,que no sopesaron la  posibilidad de que el famoso caballo de madera fuera algo distinto a un regalo inocente.


Creo que el estallido de la burbuja fracking, no reducirá la fe en el progreso. Porque es muy difícil pensar que la forma actual de hacer negocios como de costumbre, está acabada

Existen documentos históricos que nos muestran que la reacción de los habitantes de la ciudad romana de Treveris, pidieron dinero al Emperador romano para proseguir con unos festejos que habían sido interrumpidos por una partida de bárbaros que había saqueado la ciudad.
Una historia similar se puede contar acerca de los ciudadanos de Carthago.

Treveris y Cartago son buenos ejemplos acerca de que a la gente le gusta hacer negocios como de costumbre(BAU), lo que en el caso de los romanos era "Panen et Circenses". "

La respuesta del Archidruidaha sido que coincide en lo de la Psicología de Masas, pero no ha mencionadoque esté de acuerdo  con la última parte de mi mensaje en el que le intento transmito mi opinión de que la gente va a mantener su fe en el progreso contra viento y marea.


 

[jgustavo]

algo tipo:
"a medida que la cantidad de gente aumenta, la media de Coeficiente intelectual baja.
independientemente de los valores individuales de Coeficiente intelectual."
o
"cuanta mas gente, mas tonta se pone la masa"

[sistudey]

Coincido completamente contigo, la gente lo último que perderá será la fe en el progreso. ¿Por qué? Por nuestro sesgo psicológico. Somos muy incautos a la hora de abrazar una nueva creencia, opinión o idea, pero una vez que nos formamos una, nos aferramos a ella como si nuestra propia vida dependiera de ella, negando o agrediendo las ideas contrarias y a sus autores.

[Dario Ruarte]

Que guanaco este sistudey !!

Resulta que leía el post y veía la fecha -22 de Agosto- y pensaba que era NUEVO pero, cada cosa que leía me sonaba conocida... hasta que llegue A MI PROPIO MENSAJE !!

Y seguía pensando que era de "ahora"... pero no me acordaba de haber escrito hace dos días tal cosa... empecé a sospechar de mi precaria salud mental.

Finalmente, me doy cuenta que es de Agosto de 2014 !! ... pero el comentario de sistudey es del 2015 !!

Bonita confusión de fechas y un rato de incertidumbre ante la sospecha del que "el alemán" hubiera hecho presa de mi cabeza de un modo rápido y efectivo.