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Anselmo.
En el mito de la máquina, Lewis Munford decía que el avance humano estaría presente en una supermáquina
diseñada para operar de forma automática. En vez de obrar como una personalidad autónoma y activa, el hombre se iría convirtiendo en un objeto pasivo y sin objetivos propios, una especie de "animal condicionado por las máquinas..."
En nuestra sociedad se hace muy evidente usar un enfoque materialista, para intentar definir cómo es nuestra sociedad y como factores materiales explican que unos ciudadanos, culturas o países se desarrollen, mientras otros se empobrecen. Es decir, que el progreso no viaja en todas direcciones y la idea del progreso no es igual para todos.
El texto de Andrei Fursov no lo puedo seguir bien, pero de 1600 a 1900 hubo un salto en formas de producción industrial, como la textil, que luego se estancaron, mientras que la tecnología en medios de comunicación avanza más tarde.
Cualquier definición adecuada de la técnica debería dejar claro que muchos insectos, pájaros y mamiferos
habían realizado innovaciones mucho más radicales en la fabricación de recipientes (con sus intrincados
nidos, sus colmenas geométricas, sus hormigueros y termiteros , sus madrigueras etc.) que los antepasados del Homo sapiens.
En resuman, si la habilidad técnica bastase como criterio para identificar y fomentar la inteligencia, comparado con muchas otras especies, el hombre fue durante mucho tiempo un rezagado.
Las consecuencias de todo ello deberían ser evidentes, a saber, que la fabricación de herramientas no
tuvo nada de singularmente humano hasta que se vio modificada por símbolos lingüísticos, diseños estéticos y conocimientos socialmente transmitidos.
Y lo que marcó tan profunda diferencia no fue la mano del hombre sino su cerebro, que no podía ser el resultado de una labor manual pues ya lo encontramos bien desarrollado en criaturas como las ratas que no tienen dedos libres
Thomas Carlyle describió al hombre como «un animal que usa herramientas» que es algo que hubiera sentado como un tiro a Platón, ya que el único dios trabajador manual es Hefestos con su fragua, que vive en el submundo.
Y sin embargo, cuando nos referimos a progreso, casi todo el mundo acude a productos "fetiche" como el smartphone. Claro que creo en el progreso, y alguien saca del bolsillo un Iphone y me dice: mira que maravilla ...
Pero éste mundo material va ligado a un menor saber. Me he dado cuenta, de que los que se jactan de amplios conocimientos, en realidad dejan de sorprenderse de su ignorancia. Tal como explicaba Pascal, a medida que uno sabe más , se convierte en planeta mas grande y la frontera con el desconocimiento se agranda... pero ahora no nos sorprende. Hemos perdido capacidad de asombro.
Yo sigo leyendo. No leo cosas de internet. Me saco libros de la biblioteca y me gusta comprar aquellos libros a los que no tengo acceso , pero creo que son muy edificantes.
Si alguien me pregunta si hay algo que puede significar un progreso para la humanidad, yo le diré que sí, y que ése invento es el arte.
muchas gracias
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Cerrado
