Encima, resulta que la 'superplanta' de baterías (muy cacareada, mientras que los 15.000M$ de la planta de Intel pasa desapercibida, a pesar de los múltiples retrasos debido a la falta de facturación), no la paga ni Tesla ni Solar City, si no el Papá estado de Nevada...
La verdad es que le debemos mucho a nuestros papás estado y al Tío Sam, ya que nos han pagado una parte de los juguetes verdes con los que juegan los ricachones, a costa de pagar a escote, de nuestros impuestos de los no ricachones...