Pues a lo mejor hay que parar ciertas industrias cada poco, y abrirlas por la noche en su lugar, si hace falta. Sería una lata para los trabajadores y trabajadoras, pero peor es la alternativa...
Un ejemplo de un sistema que periódicamente no es capaz de satisfacer la demanda, y sin embargo no se dimensiona: las carreteras. Podríamos hacer las autovías de una docena de carriles y así no habría tanto atasco los domingos por la tarde o a la vuelta de vacaciones, como hoy.
En lugar de ello, nos aguantamos. Hoy, por ejemplo, en la A62 estaba prohibido el tráfico de camiones de más de 7,5 toneladas. Aunque sea un fastidio para los camioneros y camioneras.
La noche es oscura y alberga horrores.