POST: John M. Greer –“Resucitando la economia doméstica ”

Previous Topic Next Topic
 
classic Clásica list Lista threaded En Árbol
3 mensajes Opciones
Responder | En Árbol
Abrir este mensaje con la vista en árbol
|

POST: John M. Greer –“Resucitando la economia doméstica ”

Anselmo
30 DE JULIO DE 2008

http://thearchdruidreport.blogspot.com.es/2008/07/reviving-household-economy.html

Parte uno: el mundo fuera del Mercado



A medida que el actual empujón ascendente a los precios del petróleo continua - una de los principales tipos de petróleo alcanzó un precio por encima de los 120 dólares por barril  ayer , aunque sin embargo bajó unos 4 dólares en el mercado a primera hora de hoy - los escépticos con respecto al cenit del petróleo  han aprovechado la oportunidad para insistir en que no hay nada equivocado con respecto al petróleo  que unos pocos miles de billones de dólares no puedan solucionar. Una lección interesante que se puede extraer del actual bombardeo de los medios de comunicación es que la mayoría de la gente que rechaza el concepto del cenit del petróleo, en realidad parece ignorar el significado de dicha frase.

Un ejemplo a señalar en un reciente comentario aparecido en prensa (vinculo) que denuncia al cenit del petróleo como un “total disparate”,  Basándose en el argumento de que el mundo puede continuar unos cuarenta años más manteniendo el ritmo de extracción actual.  El autor de este artículo de algún modo consiguió pasar por alto el hecho de que la teoría del cenit del petróleo  se centre precisamente en la idea de que el da por garantizado, la sostenibilidad del ritmo de producción actual.  El mundo puede tener el equivalente a cuarenta años de producción al ritmo actual de extracción por gastar en sus reservas, pero si la cantidad de petróleo que se puede extraer cada año alcanza un máximo en el que se estabiliza a lo largo de unos años  en lo que se puede asimilar a una meseta, y entonces comienza  a reducirse debido a limites geológicos, Una economía global fundada en suministros energéticos continuamente crecientes  se encontrara en problemas. Esta es  la esencia de la postura de quienes creen que el cenit del petróleo constituye un problema de la mayor envergadura y que invocar el tamaño total de las reservas mundiales del petróleo no contribuye en absoluto a demostrar que tal problema no existe.

No obstante, no resulta sorprendente que tantísima gente esté encontrando justo en este momento formas tan ingeniosas para evitar  hacerse cargo de las implicaciones que supone el cenit del petróleo. A medida que la producción global de petróleo  permanece atascada en su actual meseta -  una meseta que cada vez más debe ser apuntalada por la producción en masa de biocombustibles de alto coste y productos obtenidos de las arenas bituminosas- alguna de las más básicas presuposiciones del mundo moderno están perdiendo su vigencia. Una vez que la producción comience a deslizarse cuesta abajo por la cara descendente del pico de Hubbert , tal proceso tenderá a acelerarse , y mucho de lo que cuenta como sabiduría convencional hoy en día pasará a ocupar su lugar correspondiente  en el vertedero de la historia, justo entre la teoría física,  que afirmaba que una sustancia denominada el "flogisto" era la causante de que las cosas pudieran arder, y la doctrina política del derecho divino de los reyes.    

Un ejemplo con implicaciones de largo alcance se desarrolla a partir de a partir de una particular falta de conciliación entre las corrientes económicas actuales  y las realidades prácticas de la era del cenit del petróleo. Quizás el mejor modo de introducir este ejemplo es invitar a mis lectores a ponerse  un calzado cómodo para caminar, coger sus bolsas de compra reciclables y unirse a mí en un paseo para hacer compras en la ciudad el sur de Oregón donde vivo , el martes es el día del Mercadillo  semanal de agricultores , y de este modo, ayer tal como hacemos casi toso los mates entre marzo y noviembre , junto a mi mujer Sara recorrí  caminado los mil doscientos metros  hasta el parking de la armería de la Guardia Nacional donde los granjeros locales y rancheros montan un mercadillo semanal para vender su producción al por menor. Entre nuestras compras había una caja de frambuesas frescas , y esta tarde haremos con ella una mermelada casera de frambuesas que consumiremos a lo largo del año que viene.
Es evidente que podíamos haber comprado la cantidad equivalente de mermelada de frambuesas en el mercado, en lugar de elaborarlas nosotros. No obstante, estas dos maneras de adquirir un suministro de mermelada de frambuesa no tienen nada que ver la una con la otra.  Dejando a un lado de momento la mayor calidad de la mermelada casera,  la cual  en este caso al menos esta elaborada a partir de ingredientes más frescos) y preparada en pequeñas cantidades ;  una de las más importantes diferencias entre estos dos procesos es que la mermelada casera representa  . Un uso mucho más eficiente de los combustibles fósiles.

La agricultora que cultivo las frambuesas , empleo métodos orgánicos ,  los cuales ahorraron el petróleo y el gas natural que de otro modo habría sido destinado a pesticidas y a fertilizantes . Mientras ella empleó una furgoneta para llevar su cosecha al Mercado , las diez millas o así que ella condujo se comparan favorablemente con los miles de millas que los productos agrícolas son rutinariamente transportados en su viaje desde la granja a la planta envasadora , almacén , y supermercado , e incluso si nosotros hubiéramos tenido coche y lo hubiéramos empleado para hacer le trayecto de ida y vuelta, los dos kilómetros y medio de gasto en combustible  no habrían supuesto demasiada diferencia.  

Transformar frambuesas  en mermelada  y envasar el producto obtenido  probablemente requiere una cantidad aproximadamente igual de energía por cada  medio litro de mermelada, independientemente de que esta sea elaborada en una cocina doméstica o en una gran  fábrica, aunque resulta mucho más fácil aportar la energía que se precisa mediante una cocina solar u otra fuente de energía renovable a una pequeña escala.  Incluso sin esto, no obstante, la mermelada casera  requiere una pequeña fracción de la energía  para ir desde su planta hasta  nuestra alacena de la que requise la comercial.  Una medida de este ahorro de energía es que, incluyendo todos los gastos , nuestra mermelada casera nos cuesta aproximadamente dos tercios de lo que nos cuesta la misma cantidad de mermelada comercial.

Comparándose la mermelada casera con su equivalente comercial desde el punto de vista de las medidas económicas comerciales, no obstante, y el equilibrio se desplaza en sentido contrario.  En términos de su impacto en el producto interior bruto -  generalmente continuado como la medida más universalmente reconocida de la prosperidad nacional - nuestra mermelada casera es prácticamente un desastre económico. El muy modesto precio de las frambuesas, azúcar, pectina y las nuevas tapas para nuestros tarros de cristal ya muy reutilizados  es la única contribución que esto hace a la economía. Por contraste, fabricar, transportar y almacenar y vender la mermelada comercial requiere  directamente e indirectamente, el gasto de una muy gran cantidad de dinero, lo cual implica un mayor producto interior bruto.

Considerando la economía desde la perspectiva de  los participantes en la creación de la mermelada doméstica, no obstante, Y las cosas toman una aspecto muy diferente. Incluso aparte de las otras razones por las que Sara y yo podamos encontrar preferible la mermelada doméstica,  tenemos un importante motive económico; Elaborando nuestra propia  mermelada obtenemos un producto superior a un precio menor , el agricultor de las frambuesas ,  a su vez , se beneficia de algún modo por la misma decisión;  precio al que ella vende sus frambuesas a los consumidores es varias veces superior que el precio al que le pagarían los mayoristas. De acuerdo con la disciplina económica convencional , el resultado final de final de individuos buscando libremente su provecho en un mercado debería ser la maximización de la prosperidad. -e incluso si la prosperidad es medida de el PIB nuestra libre persecución de nuestro interés  resulta en una reducción de nuestra contribución a la prosperidad nacional.

Lo que está sucediendo aquí, naturalmente, refleja una de los mayores zonas ciegas de la disciplinan económica  contemporánea; La suposición de que las transacciones mercantiles mediadas por dinero son la única forma de actividad económica. Nuestras actividades mermeladeras caen por debajo del radar económico a partir del momento en que pagamos pro las materias primas.-la misma mermelada puesta en venta en el mercadillo de la semana siguiente proporcionaría unos ingresos substancialmente mayores que el coste de las materias primas - pero está siendo producida fuera de la economía de mercado , y de ahí el que carezca de existencia oficial en una economía medida enteramente por parámetros monetarios.

Lo que hace que esto resulte particularmente relevante en el crepúsculo de la era del combustible barato  es que las naciones industriales del mundo y sobre todo los Estados Unidos  se han dedicado durante  más de la mitad del siglo pasado a  transferir lo máximo posible de la economía casera a la esfera mercantil.  En hacer nuestra mermelada, entre otras cosas,  Sara y yo pertenecemos a una minoría de amos de casa.  Una Mirada retrospectiva a cien años atrás en contraste con n la inmensa mayoría de la población ,aparte de los muy ricos y los muy pobres  tenía una active economía domestica  que producía una gran fracción del total del os bienes y servicios que ellos consumían . Muchos factores contribuyeron a este intenso cambio, pero uno de los más importantes fue la disponibilidad de energía barata y abundante.
La mayor parte de las economías de escala que hacen la producción masiva de comidas procesadas económicamente viable , después de todo son económicas debido a que los costos de transporte son lo suficientemente bajos como para hacerlas viables.  Tan recientemente como en la primera mitad del siglo 20, la mayoría de los productos de consumo eran producidos localmente para los mercados regionales, en buena parte debido a que los costos de transporte continuaban siendo lo suficientemente grandes como para hacer la distribución nacional una propuesta excesivamente costosa.  (Aquellas marcas que encontraron un nicho a escala nacional , tales como Coca-Cola,  lo consiguieron gracias a establecer franquicias de fabricación y embotellado con empresas locales) fue preciso el naciminto de una red de transporte de camiones alimentados con gasoil, empleando una inmensa red de autopistas interestatales para crear las cadenas de distribución de hoy en día ,  el petróleo barato aportó el fundamento sobre el cual todo el sistema creció.

El crepúsculo del petróleo barato, a su vez , es una clara apuesta para invertir el sentido de este proceso de centralización económica.  a medida que los costos de transporte asciendan para convertirse en un aparte mayor del coste de los productos de consumo ,  las economías  a obtenerse por la producción local antes o después sobrepasarán a las economías de escala que conforman el sistema actual ,  abriendo nichos económicos para empresas pequeñas y de mediano tamaño lo suficiente ágiles para fluir con las corrientes del cambio económico.   Del mismo modo, no obstante, las ventajas financieras de la economía domestica llegaran a ser insuperables. En un mundo de petróleo escaso ,  cualquier cosa que pueda contribuir a reducir la cantidad de combustible fósil que tiene que destinarse para la obtención de un producto será muy bien recibida,     y si la transición a la era de la escasez implica un empobrecimiento generalizado – tal y como parece más probable en este momento-la elección hecha por muchas amas de casa a todo lo largo y ancho del mundo industrial bien puede resultar las cosas por ellas mismas o bien no hacerlas.

Al mismo tiempo resulta crucial  reconocer que las fuerzas sosteniendo el actual orden económico  en pie van más allá de las áreas de los cálculos económicos Hacia las más inciertas áreas de la cultura y de la psicología de masas. Para quienes tienen acceso al cultivo de frutas- –y con el crecimiento de mercadillos agrícolas a través de los Estados Unidos aquí y allá ,  esto ha llegado a ser una tolerablemente grande fracción de las población - elaborando su propia mermelada , así como muchos otros productos alimenticios, es ya una propuesta rentable , tal y como tantas otras actividades que una vez formaron parte de la economía doméstica  y que muy probablemente lo harán de nuevo; todavía estas actividades permanecen como meras aficiones de una minoría de los estadounidenses del presente y, por el contrario muchos de sus vecinos, recurren a la economía de mercado para adquirir productos inferiores y a mayores precios. Las fuerzas motivando este tipo de irracionalidad económica serán el tema principal  del post de la semana que viene.
Responder | En Árbol
Abrir este mensaje con la vista en árbol
|

Re: POST: John M. Greer –“Resucitando la economia doméstica ”

Bihor
De nuevo, una vez más, agradecerte el que nos hayas brindado esta traducción.

La verdad es que JMG desborda optimismo por todos los lados, y para nosotros es quien encabeza la postura, vamos a decir opuesta, a la visión de Ugo Bardi y su acantilado Séneca, proponiéndonos un descenso catabólico.

Muchos somos los que vemos que, no ya el comienzo del descenso, siendo del tipo que fuera, tanto suave como abrupto, sino en las inmediaciones del mismo, nos va a conducir a un acantilado, si no ya de tipo energético, sí de tipo social y político. Muchos vemos cómo se han ido convirtiendo en estados fallidos aquéllos que gozaban de recursos energéticos, gracias a la intervención de los consumidores de sus recursos (es decir, todos nosotros) y protestamos por la degeneración política/social/económica en la que nos estamos sumiendo, sin percatarnos que son el primer síntoma de la implosión venidera de nuestros estados (pasarán también ellos a ser estados fallidos). Sería fantástico el pensar que el actual sistema no va a morir matando, que nos dejará seguir haciendo nuestras mermeladas caseras, que nos permitirá cultivar nuestros campos de manera orgánica, que nos facilitará el cuidado de los animales de granja para que podamos subsistir... Me temo que en ésto JMG se equivoca de lado a lado, pues lo que está pasando (presente, no futuro), es que se están recortando las libertades, se está gravando el autoconsumo, se está desligitimizando el modo de vida que hace un siglo era la forma de vida de nuestros abuelos o bisabuelos...

Creo, y me temo mucho que no me equivocaré, es que, aunque energéticamentente pudiéramos encarar nuestro futuro como un descenso catabólico, políticamente/socialmente/económicamente nos vemos abocados a un futuro como un inmenso acantilado en el que nos iremos sumiendo uno tras otro, en unas ocasiones por paises enteros, en el resto por capas sociales.

Os dejo una imagen para arrancaros una sonrisa, aunque sea un poco tristona, de la mano del genial Quino:

Regla de oro: trata a los demás como querrías que te trataran a ti
Responder | En Árbol
Abrir este mensaje con la vista en árbol
|

Re: POST: John M. Greer –“Resucitando la economia doméstica ”

Mr Mindundi
Quizás lo que ocurre, Bihor, es que JMG escribe desde el corazón del sistema, una de las posibles futuras Bizancios a las que hace referencia Dario cada tanto.

En cambio Bardi, y nosotros mismos, pensamos desde un capitalismo de periferia, países, que en casos como España, se incorporaron tardíamente a la última etapa BAU y para los cuales sea mas probable Séneca que Bizancio.

Todos somos de "un padre y una madre".
El capitalismo no es homogéneo y eso tendrá consecuencias.

Saludos

Ah, gracias Anselmo!!