La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Berni ARG
Colapso?
No sé porque hablar de colapso se confunde con extinción.
No hace falta que desaparezca la humanidad para hablar de colapso.
Y comparar los colapsos de imperios como el romano o el español con el actual en curso, no es un razonamiento válido, entre otras cosas, por la situación de esa "capacidad de carga" que tanto atemoriza a David.

Cualquier situación de colapso pasada tenia cientos o miles de "puertas" abiertas para permitir la salida y supervivencia en situaciones mas que dignas a la mayoría de la población, y en algunos casos ni se enteraba del colapso.

Hoy, debido a la concentración de la mayoría de la población en grandes centros urbanos, alejada de todo lo que pueda generar alimentos o agua; la economía altamente globalizada e interdependiente, la ignorancia de cualquier otro mecanismo que no sea girar la perilla del gas para cocinar o abrir la puerta de la nevera para tomar un pollo, y al maldito exceso de la "capacidad de carga", la situación de descenso en los escalones del colapso implica e implicará la muerte de cientos de millones de personas de a tacadas.

Sin necesidad de aplicar ni eugenesias ni nada, ni planes conspiranoicos a los que parecen ser tan afectos algunos participantes hoy en el foro (algunos ya dan verguenza ajena, en cualquier momento nos tiran un reptiliano por el foro), y no hablo de vos, David.

Y no, no moriremos todos, seguiremos aquí hasta que aquella muerte térmica que alguno supo traer por el foro nos alcance, seguramente mucho tiempo antes...sin embargo,yo no me atrevería a decirle a a los Somalies, por ejemplo, que no están sufriendo un colapso, y que en todo caso, la humanidad sigue viviendo.

Pero ya vendrán los Alb's a mostrarnos las estadísticas de la disminución del hambre.

Colapso? Tu madre!

Abrazo
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

quark
En respuesta a este mensaje publicado por Fleischman
CONTENIDOS ELIMINADOS
El autor ha borrado este mensaje.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Fleischman
En respuesta a este mensaje publicado por Berni ARG
A menor escala, todo eso se ha dado en el pasado.

Roma se estima que llegó a tener más de un millón de habitantes:

https://arraonaromana.blogspot.com/2017/07/con-cuantos-habitantes-conto-roma-en-la_29.html?m=1

Más que toda Extremadura actualmente, desde donde escribo ahora.

Y seguro que en las ciudades chinas había la hostia de chinos...

Las comunicaciones eran más lentas, pero había comercio de una punta a otra del mundo conocido. Roma comía el grano de Egipto, en el imperio español no se ponía el sol. Obviamente el galeón de Manila tenía menos capacidad de carga de un supercargero tocho de los de ahora, pero todo es una cuestión de escala. El hecho de que ahora se transporten más mercancías no es necesariamente malo, pues somos más eficientes, a veces por chorradas como estandarizar las medidas de los contenedores.

Y también hubo guerras, ?no hubo Colapso para Cartago? Más que para la Somalia de ahora.

Quiero decir que alguien en el siglo I pudo decir los mismos argumentos: estos romanos (o chinos) viviendo en grandes ciudades alejados de los campos de trigo (o arroz)... Si alguien le hubiera dicho que en el mundo habría 8000 millones de personas, no lo habría creído.

Por supuesto que hay límites, pero ?son justamente los de ahora? Recuerdo que los límites llevan siendo los de justamente ahora desde que existen los foros de internet, y todas las profecías han fallado. Quizá alguna acertará alguna vez, pero quizás sea por pura (mala) suerte, no por los mismos razonamientos que fallan una y otra vez.

Insisto: si una previsión falla, o es por mal razonamiento o por malas premisas, y no deberíamos seguir haciendo previsiones sin cambiar nada (a riesgo de volver a fallar, claro).
La noche es oscura y alberga horrores.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Fleischman
En respuesta a este mensaje publicado por quark
Y ambas versiones se equivocan...
La noche es oscura y alberga horrores.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Dario Ruarte
Honestamente creo que amerita un hilo propio pero, para no dividir demasiado las cosas voy a poner este "súper-tocho" aquí.

Esta es la fuente. Se trata de una nota escrita por Douglas Rushkoff que, a estarnos a su descripción en Wikipedia es: Douglas Rushkoff es un escritor, columnista y profesor de cultura virtual, estadounidense, en la Universidad de Nueva York. Psiconauta, es uno de los principales teóricos del cyberpunk.

http://ctxt.es/es/20180801/Politica/21062/tecnologia-futuro-ricos-pobres-economia-Douglas-Rushkoff.htm

La verdad es que me dejó temblando. No pensé que la cosa estuviera tan paranoica.

¿ Alguien dijo "Bizancio y Somalia" en la sala ?

===

La supervivencia de los más ricos y cómo traman abandonar el barco

El año pasado me invitaron a dar una charla en un resort de superlujo ante un público que suponía integrado por unos cien banqueros de inversión. Nunca antes se me había ofrecido tanto dinero para dar una charla –la mitad de lo que gano en un año como profesor– y todo por intentar arrojar algo de luz sobre “el futuro de la tecnología”.

Nunca me ha gustado hablar sobre el futuro. Los actos en formato pregunta y respuesta tienden a acabar siendo como una especie de juego de salón en el que se me pide opinar sobre la última palabra tecnológica de moda como si fueran indicadores para potenciales inversiones: cadena de bloques, impresión 3D o CRISPR. Rara vez tiene el público un interés real en aprender acerca de las nuevas tecnologías ni sobre su potencial impacto, más allá de poder discernir entre invertir o no en ellas. Pero el dinero es lo primero, así que acepté el bolo.

A mi llegada, pensé que me conducirían hasta el camerino, pero en lugar de colocarme un micrófono o llevarme hasta el escenario, me dejaron sentado ante una mesa redonda e hicieron pasar a mi audiencia: cinco tipos súper ricos (sí, todos ellos varones), y de las altas esferas en el mundo de los hedge funds. Después de intercambiar unas breves palabras no tardé en advertir que tenían nulo interés en los contenidos que me había preparado sobre el futuro de la tecnología. Venían con su propia batería de preguntas preparada.

Empezaron planteando cuestiones bastante inocuas tales como ¿Ethereum o bitcoin? ¿Es real la computación cuántica? Sin embargo, sin prisa pero sin pausa, fueron escorando sus preguntas hacia los temas que verdaderamente les preocupaban.

¿Qué región se vería menos afectada por la crisis provocada por el cambio climático, Nueva Zelanda o Alaska? ¿Realmente Google está construyéndole a Ray Kurzweil un hogar para albergar su mente? ¿Logrará su conciencia sobrevivir a la transición, o por el contrario perecerá y renacerá una completamente nueva? Y, por último, un director general de una agencia de bolsa comentaba que estaba a punto de terminar de construirse un búnker y lanzó la pregunta:“¿Cómo conseguiré imponer mi autoridad sobre mi guardia de seguridad después del acontecimiento?”. 

El acontecimiento. Este era el eufemismo que empleaban para el colapso medioambiental, la agitación social, la explosión nuclear, la propagación imparable de un virus o el momento en que el hacker de Mr. Robot acabe con todo.

Esta fue la cuestión que nos mantuvo ocupados durante toda la hora restante. Eran conscientes de que necesitarían vigilantes armados para proteger sus instalaciones de las masas encolerizadas. ¿Pero, con qué iban a pagarles cuando el dinero ya no valiera nada? ¿Y qué impediría a su guardia armada elegir a su propio líder? Estos multimillonarios barajaban recurrir a cerraduras de combinación especiales para proteger el abastecimiento de alimentos, que sólo ellos controlarían. O poner a sus vigilantes algún tipo de collar disciplinario a cambio de su propia supervivencia. E incluso, crear robots capaces de servir como guardias o trabajadores, si es que daba tiempo a desarrollar la tecnología necesaria.

PARA ELLOS, EL FUTURO DE LA TECNOLOGÍA EN REALIDAD
CONSISTE EN UNA COSA: LA CAPACIDAD DE HUIDA


Fue en ese punto cuando me di cuenta de que al menos para estos caballeros, esos eran los temas que pretendían escuchar en una charla sobre el futuro de la tecnología. Siguiendo el ejemplo de Elon Musk y su colonización de Marte, o del envejecimiento revertido de Peter Thiel o del proyecto de Sam Altman y Ray Kurzweil de subir sus mentes a supercomputadoras, se preparaban para un futuro digital que tenía bastante más que ver con la intención de trascender la condición humana y protegerse del peligro real y presente del cambio climático, el aumento de los niveles del mar, los grandes flujos migratorios, las pandemias globales, el pánico nacionalista o el agotamiento de los recursos que con la construcción de un mundo mejor. Para ellos, el futuro de la tecnología en realidad consiste en una cosa: la capacidad de huida.

No es que haya nada de malo en las valoraciones súper optimistas sobre los beneficios de la tecnología para las sociedades humanas. Es que la actual tendencia hacia una utopía posthumana es algo muy distinto, que tiene más que ver con una cruzada para trascender todo lo humano: el cuerpo, la interdependencia, la compasión, la vulnerabilidad y la complejidad que con cómo imaginar la gran migración de la humanidad hacia un nuevo estado existencial. Los filósofos de la tecnología llevan advirtiéndolo varios años: la visión transhumanista reduce con demasiada facilidad toda la realidad a los datos, y concluye que “los seres humanos no son más que objetos procesadores de información”.

Es la reducción de la evolución humana a un videojuego en el que alguien gana la partida al encontrar la ventanilla de salida, dejando que se unan al viaje algunos de sus mejores amigos. ¿Musk, Bezos, Thiel… Zuckerberg? Estos multimillonarios son los presuntos ganadores de la partida de la economía digital, vamos, más de lo mismo según la lógica empresarial de la supervivencia de los más aptos y que, para empezar, es la misma que alimenta toda estas especulaciones.

Obviamente, las cosas no siempre han sido así. A principios de los años noventa, durante un breve espacio de tiempo, el futuro digital ofrecía un final abierto a nuestra imaginación. La tecnología era como un patio de recreo que permitió a la contracultura crear un futuro más inclusivo, distributivo y pro humano. Sin embargo, los intereses económicos establecidos sólo veían en ella un nuevo nicho para la extracción de beneficios de toda la vida y demasiados tecnólogos fueron seducidos por las empresas unicornio.

Los escenarios del futuro digital pasaron a ser más como los futuros sobre acciones o los futuros de algodón, un nicho ideal para hacer predicciones y apuestas. De modo que, la relevancia de cada discurso, artículo, estudio, documental o papel en blanco solo dependía de que apuntara a un indicador bursátil. El futuro se convirtió no tanto en algo en lo que influyen las opciones por las que apostamos hoy, o nuestras esperanzas para la humanidad de mañana sino en un escenario al que estamos predestinados y sobre el que apostamos con nuestro capital de riesgo, pero al que llegamos sin más capacidad de acción.

Este enfoque permite a todo el mundo librarse de cualquier implicación moral de sus actividades. El desarrollo tecnológico tenía que ver cada vez más con la supervivencia individual que con una perspectiva de mejora colectiva. Y, lo que es aún peor, como pude comprobar, cualquier comentario de advertencia en este sentido te convertía a tu pesar en un enemigo del mercado o en un tecnófobo gruñón.

De modo que la mayor parte de los académicos, periodistas y escritores de ciencia ficción en lugar de detenerse en la dimensión ética del empobrecimiento y la explotación de la mayoría por parte de unos pocos, optaron por plantearse problemas más abstractos y elaborados: ¿Es justo que los agentes de bolsa utilicen drogas de diseño? ¿Debería estar permitido poner implantes a los niños para que aprendan idiomas? ¿Queremos que los vehículos autónomos prioricen la vida de los peatones por encima de la de los pasajeros? ¿Las primeras colonias de Marte deberían regirse por un sistema democrático? ¿Si cambio mi ADN estoy debilitando mi identidad? ¿Deben de tener derechos los robots?

LAS PLATAFORMAS DIGITALES HAN LOGRADO
CONVERTIR UN MERCADO YA DE POR SÍ EXPLOTADOR Y EXTRACTOR,
EN UNA VERSIÓN DEL MISMO AÚN MÁS DESHUMANIZANTE


Por muy entretenido que resulte en términos filosóficos plantearnos este tipo de cuestiones, lo cierto es que no contribuye demasiado a lidiar con las verdaderas disyuntivas morales que plantea el desarrollo tecnológico desatado en nombre del capitalismo corporativo. Las plataformas digitales han logrado convertir un mercado ya de por sí explotador y extractor (véase Walmart), en una versión del mismo aún más deshumanizante (véase Amazon). La mayor parte de nosotros ya fuimos conscientes de los inconvenientes que plantea la automatización de los trabajos, la gig economy y la desaparición del comercio local.

EL DESARROLLO A TODA VELOCIDAD DEL CAPITALISMO DIGITAL
TIENE UN IMPACTO DEVASTADOR SOBRE EL MEDIOAMBIENTE
Y LA POBLACIÓN MÁS POBRE A ESCALA GLOBAL


Pero el desarrollo a toda velocidad del capitalismo digital tiene un impacto devastador sobre el medioambiente y la población más pobre a escala global. Las redes de trabajo en condiciones de esclavitud están detrás de la fabricación de algunos de nuestros ordenadores y smartphones. Estas prácticas están tan profundamente arraigadas que en una ocasión una compañía llamada Fairphone, fundada desde la base con la intención de fabricar y comercializar teléfonos éticos, acabó concluyendo que era imposible. (Por desgracia, el fundador de la compañía se refiere a sus productos ahora como teléfonos “más justos”.)

Mientras tanto, la extracción de metales preciosos y los residuos que generan nuestros dispositivos de alta tecnología digital destruyen los hábitats humanos, que son sustituidos por vertederos tóxicos que acaban siendo recogidos por niños campesinos y sus familias, que vuelven a vender los materiales reutilizables a los fabricantes.

“Ojos que no ven corazón que no siente”, pero la externalización de la pobreza y del veneno no desaparece por el mero hecho de que nos pongamos unas gafas de tres dimensiones y nos sumerjamos en una realidad alternativa. Cuanto más ignoremos las repercusiones sociales, económicas y medioambientales, más problemáticas se tornarán estas. A su vez, esta situación genera una dinámica de mayor repliegue, aislamiento y fantasías apocalípticas, a la par que la necesidad de inventar desesperadamente más tecnología y planes de negocio. El ciclo se retroalimenta a sí mismo.

Cuanto más comulgamos con esta interpretación del mundo, más tendemos a ver al ser humano como parte del problema y a la tecnología como una solución al mismo. La propia esencia de la condición humana se considera cada vez menos como un rasgo definitorio y más como un virus. Las nuevas tecnologías se consideran como algo neutro, obviándose el sesgo que encierran. Así, los malos hábitos que inducen en nosotros no son más que un mero reflejo de la corrupción de nuestra propia esencia. Como si la culpa de nuestros problemas radicara de alguna forma en nuestro salvajismo innato. Igual que la ineficacia del sector del taxi se “soluciona” mediante una aplicación que arruina a los conductores humanos, las molestas inconsistencias de la psique humana se pueden corregir mediante una versión mejorada digital o genética.

En último término, de acuerdo a la ortodoxia de la tecnología que todo lo resuelve, el clímax del futuro de la humanidad llegará con la capacidad de subir nuestra conciencia a un ordenador o, quizá mejor aún, aceptar que la propia tecnología es nuestro sucesor lógico evolutivo. Ansiamos entrar en la siguiente fase trascendente de nuestra evolución, como si fuéramos miembros de un culto gnóstico, mudando de cuerpo y dejando el viejo tras nosotros, junto con nuestros pecados y pesares.

Las películas y series de televisión se encargan de la representación de estas fantasías. Las series de zombis nos muestran un mundo post apocalíptico en el que la gente no es mucho mejor que los muertos vivientes, y parece ser consciente de ello. Y, lo que es aún peor, invitan a los espectadores a imaginarse el futuro como una batalla de suma cero entre los pocos humanos que quedan, en la cual la supervivencia de un grupo depende de la destrucción del otro. Incluso la segunda temporada de Westworld, basada en una novela de ciencia ficción en la que los robots corren por ahí enloquecidos, termina con una revelación final: los humanos somos más simples y predecibles que las inteligencias artificiales que nosotros mismos hemos creado. Los robots aprenden que cada uno de nosotros puede ser reducido a unas pocas líneas de código y que somos incapaces de elegir deliberadamente. Qué demonios, hasta los robots de la serie quieren trascender los límites de sus cuerpos y pasar el resto de sus vidas en una simulación de ordenador.

LA PROPIA ESENCIA DE LA CONDICIÓN HUMANA
SE CONSIDERA CADA VEZ MENOS COMO UN RASGO DEFINITORIO
Y MÁS COMO UN VIRUS


Semejante intercambio de roles entre los humanos y las máquinas requiere una gimnasia mental que parte de la presunción implícita de que los humanos dejamos bastante que desear. O bien los cambiamos o bien nos alejamos de ellos para siempre.

Así, los tecnomultimillonarios lanzan coches eléctricos al espacio, como si esto simbolizara algo más que la capacidad de un multimillonario de hacer un poco de promoción corporativa. Y, si algunos pocos logran escapar a velocidad de vértigo y sobrevivir de alguna forma en una burbuja en Marte –a pesar de nuestra incapacidad para lograr generar una burbuja similar aquí en la Tierra, tal y como se demostró en las dos pruebas de la biosfera, que costaron miles de millones- será más bien porque la élite se ha provisto de un bote salvavidas, pero no garantizará a la diáspora humana una oportunidad de supervivencia.

Cuando los hedge funders me preguntaron cómo podrían ejercer su autoridad sobre las fuerzas de seguridad después de “el acontecimiento”, sugerí que la mejor apuesta sería empezar a tratarles muy bien desde ya. Entablar relación con ellos como si fueran miembros de su propia familia. Y cuanto más impregnaran sus prácticas empresariales, su gestión de la cadena de suministros, sus esfuerzos por contribuir a la sostenibilidad y la distribución de la riqueza de este ethos de inclusividad, menos probable sería, para empezar, que se produjera un “acontecimiento” de estas características. Toda esa magia tecnológica podría empezar a aplicarse desde hoy mismo a unos intereses quizá menos románticos pero sí más colectivos.

POR MUCHO PODER Y RIQUEZA QUE ACUMULEN,
NO SE CREEN CAPACES DE INFLUIR EN EL FUTURO


Mi optimismo les hacía gracia pero en ningún momento me lo compraron. No tenían ningún interés en evitar la desgracia; están convencidos de que ya no hay tiempo para ello. Por mucho poder y riqueza que acumulen, no se creen capaces de influir en el futuro. Sencillamente, se limitan a aceptar el más oscuro de los escenarios y a reunir la mayor cantidad de dinero y tecnología que les permita aislarse, sobre todo si se quedan sin sitio en el cohete rumbo a Marte.

Por suerte, aquellos de nosotros que no disponemos de los fondos suficientes como para renegar de nuestra propia humanidad, disponemos de un buen número de opciones mucho mejores. Ni siquiera tenemos que utilizar la tecnología de una forma tan antisocial y atomizada. Basta con que no nos convirtamos en los consumidores y perfiles individuales que quieren nuestros dispositivos y plataformas, y podemos recordar que el ser humano verdaderamente evolucionado no opta por una salida individual.

La condición humana no tiene que ver con la supervivencia o escapatoria individual. Es un deporte de equipo. Cualquiera que sea el futuro que aguarda a la humanidad, nos afectará a todos.

===

Merde!. ¿ Y estos psicópatas son "nuestras elites" ?. Estamos al horno con papas !!
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Anselmo
Curioso, estos super millonarios parecen estar siguiendo el ciclo de Kubbler- Ross, en plena etapa de negociación y encaminandose a la de depresión. Todo un drama... ¡ Pobrecitos !
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

hector77
En respuesta a este mensaje publicado por Dario Ruarte
Bueno, ciertamente una parte (desconozco el porcentaje y si son mayoria o minoria) comienza a plantearse incluso irse a Marte. Por el momento compran bunkeres, amasan viveres cual "preps" extremadamente mejor preparados......lo cierto es que por muchas medidas que tomen, si pasa algo gordo tambien les alcanzara a ellos. Un bunker es un sitio para vivir durante un tiempo determinado hasta que todo pase.

Lo realmente decisivo es la falta de compromiso de la cual que estos sujetos comienzan a hacer gala.
Asi que lo mejor es no pensar tampoco nosotros en ellos.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Anselmo
En respuesta a este mensaje publicado por Berni ARG
Puede ser que algunos de estos atribulados mil millonarios, estén temiendo las consecuencias de un cambio político a nivel mundial.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Rafael Romero
En respuesta a este mensaje publicado por Dario Ruarte
Dario Ruarte escribió
.....
y lanzó la pregunta:“¿Cómo conseguiré imponer mi autoridad sobre mi guardia de seguridad después del acontecimiento?”.

El acontecimiento. Este era el eufemismo que empleaban para el colapso medioambiental, la agitación social, la explosión nuclear, la propagación imparable de un virus o el momento en que el hacker de Mr. Robot acabe con todo.
.....
 Para ellos, el futuro de la tecnología en realidad consiste en una cosa: la capacidad de huida.
......
Creo que hay un error de interpretación.
No hay ningún lugar donde huir.
Ellos lo saben.
Y la pregunta no iba sobre donde huir, sino sobre cómo no perder el control que actualmente tienen.

El "status quo" siempre tiene TERROR a perder el control y su única posible preocupación es que se produzcan situaciones de desequilibrio que perturben su capacidad de control de la situación.

Pero mucho me temo que el "escritor" se reunió con unos cuantos multimillonarios de "tres al cuatro" poco representativos de lo que es en realidad el "status quo" que tiene perfectamente claro que es lo que tiene que hacer y como utilizar la tecnología.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Fleischman
En respuesta a este mensaje publicado por Dario Ruarte
Bueno, aquí en el foro se defiende tener una buena despensa preparada, organizarse para defenderse, incluso tener armas (y cuanto más gordas, mejor). Creo que incluso llegué a bromear con guardar un helicóptero, o algo así, cuando alguien hablaba de acumular granadas...

Así que básicamente están haciendo (o pensando) lo mismo, pero con más dinero (que sea otro el que lleva el arma, básicamente). O sea, lo mismo, pero generando puestos de trabajo...

Pero como son ricos, son malos malísimos (nosotros somos siempre buenos buenisimos). Curiosamente no suele ser noticia que la gente que gana el euromillon reparta el premio...

Otra cosa es que tuvieran poder para cambiar la situación, en cuyo caso podríamos pedirles que se gastaran el dinero en evitar... ?el cambio climático (antropogénico) que algunos niegan? ?el colapso mad max que algunos niegan? ?los populismos y nacionalismos que algunos defienden? Pero si ni siquiera nosotros nos ponemos de acuerdo, ?qué habríamos de pedirles?

En cualquier caso, ?tienen ese poder? Ellos parece ser que creen que no, esta claro que preferirían seguir siendo ricos en una playa de Bora Bora que acojonados en un bunquer.

Resumiendo, si a alguno de los presentes le toca el gordo de la lotería este año, ?qué haría?

a) comprar una finca, llenar la despensa (opción bunquer).
b) gastar el dinero para evitar el colapso por el bien de la Humanidad.
La noche es oscura y alberga horrores.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Rafael Romero
Lo que seguro no haría es preguntarle a un "escritor" que tengo que hacer para asegurarme la lealtad de mi guardia personal.

Eso si que es gastar el dinero inútilmente.

Es un relato totalmente absurdo cuyo motivación puede tener múltiples explicaciones, excepto cualquiera que pretenda revestirlo del más mínimo viso de realidad.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Fleischman
Este mensaje fue actualizado el .
En respuesta a este mensaje publicado por Berni ARG
Berni ARG escribió
Pero ya vendrán los Alb's a mostrarnos las estadísticas de la disminución del hambre.
Bueno, no es solo alb... justamente publicaban ayer en euribor:













En realidad, son cosas distintas. Una cosa es el pasado, y otra el futuro. Los que ven el pasado de color de rosa tienden a ver el futuro de color de rosa, y los que ven el futuro de color negro, tienden a ver el pasado de color negro. Pero bien podría ser rosa hasta justo hoy, y torcerse todo mañana. (Aunque no será mañana, sino el 22 de febrero de 2022. )

Habrá Somalias donde han ido a peor, de igual forma que en un futuro negro puede que haya zonas donde mejoren en medio del empeoramiento general, pero es indudable que (en términos de riqueza material, al menos, aunque quizá no en felicidad o en el número de osos panda) hemos mejorado (globalmente). Y mucho.

Lo que se discute (o se debería discutir) es si habrá punto de inflexión (y cuándo, y cómo), pero discutir el pasado es absurdo. No solo por las estadísticas (que pueden estar manipuladas o sesgadas), sino por lo que les tocó vivir a mis abuelos o incluso mis padres, y me han contado de primera mano. Antes los niños palmaban como moscas y ahora no. Punto.

Esto es así, y es lógico que así sea, pues justamente se debe (primer mandamiento peak) a que la riqueza es gracias a la energía. Si la energía ha aumentado durante todo este tiempo, es lógico que lo haya hecho la riqueza (muy mal lo tendríamos que haber hecho para que no fuera así).

Y luego, ya, lo que venga...

Añado: nótese que algunos indicadores pueden empeorar incluso por exceso de riqueza (por ejemplo, vacunaciones, mortalidad infantil). La generación de mis padres no rechazaban una vacuna, porque conocían (o les habían contado) las enfermedades. Son los pijos de ahora los que pretenden "volver a la naturaleza", justamente porque no han visto en su puta vida lo que la naturaleza es capaz de hacer.
La noche es oscura y alberga horrores.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Berni ARG
Hola Fleischman, te contestaré con un estupendo artículo de nuestro compañero Zeta.

http://quevidaesta2010.blogspot.com/2018/07/las-chanclas-y-el-lado-oscuro-de-la.html

Abrazo
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Fleischman
Si tanto petróleo no cambia nada, puede que su desaparición tampoco lo haga, entonces...

Al fin y al cabo, hay más pobres ahora en España que en Egipto en la época de los faraones.

http://www.malaprensa.com/2018/07/cuidado-con-los-estudios-cientificos.html?m=1
La noche es oscura y alberga horrores.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Berni ARG
Fleischman dice:

Bueno, no es solo alb... justamente publicaban ayer en euribor:
Por cierto, por eso he dicho "los Alb's", que vendrían a formar parte parcial o totalmente de las huestes albianas.
Que últimamente hay muchos conversos en el foro...

Sin embargo, el último post de AMT nos recuerda que algunos se están apurando demasiado en dejar atrás lo que supimos ver en algún momento.

Abrazo
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Fleischman
no sé cuántas veces habré dicho que yo no creo que vayamos a precipitarnos en el apocalipsis, que en todo caso un colapso es un proceso, no un instante, y que como tal proceso puede ser detenido sin tener que acabar en la extinción completa de la Humanidad 
(...)
tenemos recursos y conocimientos técnicos y científicos de sobra para garantizarnos un futuro brillante

Sí esto lo dice otro, sería metido dentro de las huestes albianas...

En cualquier caso, volvemos a cambiar de tema, una cosa es el pasado y otra el futuro.
Por centrar la cuestión de si somos más pobres porque hay más pobres, hago una pregunta sencilla:

?Está la población española (o japonesa, o italiana, o supongo que la argentina) más envejecida que en el pasado, o no?

La respuesta es tan obvia que te mirarán raro si lo preguntas. Y, sin embargo, podrás encontrar una fecha pasada en la que había menos niños que ahora, simplemente porque había mucha menos población.

Ahora hay más niños, pero sería absurdo decir que la población actual es más joven.
La noche es oscura y alberga horrores.
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Re: La necesidad de conocer los argumentos de los anticolapsistas

Lao-No-Tse
En el hilo de decrecimiento y feminismo Kambei sacó a esta autora a pasear y es bastante punki.

En el enlace que pongo, critica la metodología seguida en La espiral de la energía. Aviso, el post deja muy fácil señalar al dedo en vez de a la luna, pero si no se toma como ataque, sino como crítica constructiva, se puede sacar algo.

https://libertad-amor-verdad.com/2015/01/20/la-historia-y-lo-humano/
En proceso de desaprendizaje constante... ¡y subiendo!
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